- Escrito por Redacción
El profesor pontanés Juan Roa participa en la publicación de un estudio que abre nuevas puertas al tratamiento de patologías como la obesidad o la infertilidad
Investigadores del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica (IMIBIC) y de la Universidad de Córdoba (UCO) dirigidos por el Catedrático Manuel Tena-Sempere y por el profesor pontanés Juan Roa Rivas han publicado recientemente un artículo en la prestigiosa revista internacional Nature Communications en el que estudian el papel de los microRNAs (miRNAs) en el control de la pubertad y la fertilidad.
Este proyecto, que fue iniciado por el investigador Juan Roa tras su regreso de una estancia postdoctoral de dos años en la prestigiosa Universidad de Otago (Nueva Zelanda) ha tenido un recorrido de más de 10 años, durante los cuales han participado en este estudio varios investigadores del IMIBIC y de la UCO, así como investigadores de prestigiosas instituciones internacionales como el INSERM (Francia), la Universidad de Turku (Finlandia) y la Universidad de Gothenburg (Suecia).
Los miRNAs son unas moléculas pequeñas compuestas de material genético (ARN, en este caso) que han tomado una enorme relevancia en los últimos años debido a su asociación con la aparición y la evolución de distintas patologías, entre las que se encuentra el cáncer, la obesidad y enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer.
Para la publicación de este artículo, en el que también ha participado el doctorando Miguel Ruiz Cruz junto al resto del equipo, los investigadores han llevado a cabo una serie de complejas técnicas genéticas enmarcadas dentro del ámbito de la neurociencia que les han permitido eliminar selectivamente los miRNAs de una población de neuronas cruciales para el funcionamiento del eje reproductor, las neuronas Kiss1. Estas neuronas, que recientemente han sido también implicadas en el control del metabolismo, representan una de las piedras angulares sobre las que se sustenta el cerebro para controlar la adquisición de la capacidad reproductora, durante la pubertad y el mantenimiento de la fertilidad durante la etapa adulta.
Como consecuencia de este estudio, estos investigadores, que también pertenecen a la red CIBER Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición del Instituto de Salud Carlos III, han podido identificar que estos miRNAs son absolutamente fundamentales para el mantenimiento de la fertilidad durante la etapa adulta, mientras que existen diferencias en el impacto de estos sobre la maduración puberal, dependiendo del sexo.
Los resultados que derivan de este estudio abren una puerta al uso potencial de ciertos miRNAs para el tratamiento de patologías cuya incidencia está creciendo de forma exponencial en las últimas décadas, como la obesidad, la infertilidad o síndromes complejos que aúnan ambas patologías, como el síndrome de ovario poliquístico. En este sentido, ya existen varios proyectos clínicos que han probado con éxito la manipulación de ciertos miRNAs para el tratamiento de distintos tipos de cáncer. En la misma línea, uno de los primeros autores de este proyecto, el pontanés Juan Roa, está liderando en la actualidad varios proyectos de investigación traslacional dirigidos a identificar miRNAs involucrados en el desarrollo de obesidad y otras complicaciones metabólicas en la población pediátrica, con resultados muy esperanzadores para su potencial aplicación clínica.