- Escrito por J.C. Campaña
Plaza Lope de Vega o el paradigma del ineficiente modelo de las obras PFEA
Las obras para la remodelación integral de la Plaza Lope de Vega se encuentran actualmente paralizadas tras haber concluido los plazos programados para finalizar el proyecto. A la vista de los resultados, la planificación hecha para esta ambiciosa reforma ha resultado ser insuficiente, y ahora será el Ayuntamiento el que por medios propios tendrá que asumir la finalización de las obras. Desde hace varias semanas los vecinos de la Plaza y calles adyacentes han venido mostrando su profundo malestar por el estado en el que se encuentra el barrio, con los acerados a medio terminar y con muchos problemas para aparcar o llegar a sus viviendas con normalidad.
Las obras, presupuestadas en 622.000 euros, arrancaron a mediados de 2019 y estaban incluidas dentro de la remesa de proyectos que el Ayuntamiento de Puente Genil presentó a la convocatoria del Plan de Fomento Agrario para el año 2018. Al igual que en Lope de Vega, los vecinos de otros barrios como el de las Cantarerías, Miragenil o Calle Pilar también llevan meses sufriendo los inconvenientes de unas obras interminables.
Las obras PFEA tienen como objetivo dar empleo, en el mayor de los casos con contratos de 15 días, a los trabajadores temporeros agrícolas. En el caso de Lope de Vega se ha contratado a unas 250 personas, aunque este número finalmente ha sido insuficiente puesto que tras consumir el plazo y el presupuesto previsto para peonadas la obra ha quedado paralizada a mitad de su totalidad. El Ayuntamiento tiene previsto que un equipo de albañiles de su propia plantilla se incorpore en unos días para retomar las obras.
Ante este panorama, el alcalde de Puente Genil, Esteban Morales, ha reconocido esta mañana que “los ayuntamientos estamos sufriendo una problemática porque cada vez las personas que nos envían a las obras PFEA son menos eficientes, en el sentido de que los proyectos exigen una mayor cualificación, y eso provoca que se alarguen y que tengamos que poner más medios propios del Ayuntamiento, que siempre tiene que aportar a sus albañiles”. A ello, Morales añadió que “igual somos demasiado ambiciosos a la hora de proyectar unos planes PFEA muy grandes para una mano de obra de un trabajador que viene 15 días y no tiene especialización en albañilería”. Tras esta reflexión, el regidor reconoció que “tenemos que revisar esa circunstancia y buscar la solución para que no se alarguen tanto, y entiendo que los vecinos se cansen de las molestias, pero les pido un poco de comprensión porque las personas que están trabajando en ello no son especialistas en albañilería y necesitan una mínima renta”.